jueves, 2 de junio de 2011

UN PERIODISTA

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  • Es trabajar por la verdad, buscarla y aproximarse a ella por encima de los prejuicios propios y ajenos.
  • Es informar a la comunidad de los hechos que merecen ser convertidos en noticias.
  • Es dar a conocer acontecimientos de interés público después de analizar y valorar muy bien los datos que se poseen.
  • Es tener prudencia de no precipitarse y averiguar muy bien por la validez de fuentes de información.
  • Es decir las cosas de forma que sean los hechos los que hablen y no se note lo que piensa quien redacta la noticia.
  • Es preferible escuchar mucho a hablar mucho: dos oídos – el doble de lo que se habla – una sola boca – es norma de sentido común.
  • Es no convertir en risa lo que es causa de dolor, ni tristeza lo que es motivo de alegría.
  • Es saber que la calumnia es siempre una acusación falsa hecha maliciosamente y que difamar es atentar contra la honra ajena aunque sea cierto lo que dice.
  • Es callar cuando con hablar los daños para las personas y la sociedad, pueden ser peores.
  • Es averiguar por si mismo y no repetir las cosas oídas sin verificarlas.
  • Es amar la exactitud y la imparcialidad.
  • Es hablar y escribir con claridad, brevedad y corrección.
  • Es no mezclar nunca la información con las propias opiniones.
  • Es respetar el derecho del público a ser informado verazmente.
  • Es procurar no usar adjetivos al redactar las noticias, porque un adjetivo puede acabar con la objetividad.
  • Es renunciar a la pasión política y a las emociones que enturbian la información.
  • Es saber preguntar y saber recoger las respuestas sin permitir que la información invente o deforme. Es ayudar a clarificar problemas y no ayudar a crear más problemas.
  • Es estar en actitud de aprender siempre, el estudio es el mejor respaldo para oír, ver y escribir mejor.
  • Es ser respetuoso con todas las personas cualesquiera que sea su edad, su condición o su papel en la sociedad.
  • Es no condenar antes de que lo hagan los jueces.
  • Es procurar que el bien sea noticia. Es dominar la técnica de un oficio y perfeccionarse en ellas como artesano en el manejo de sus herramientas.
  • Es poseer una cultura general que dé una visión adecuada de la vida, del mundo y de la sociedad en que vive.
  • Es distinguir muy bien entre actualidad, novedad e interés de información.
  • Es no ceder a la tentación de poder de la información para someter o explotar a otros.
  • Es tener conciencia de las limitaciones personales y aceptar la ayuda de sus colegas, por aquello de que cuatro ojos ven siempre más que dos.
  • Es luchar contra la vanidad de verse u oírse en letra impresa, en sonido o en imagen.
  • Es guardar celosamente lo que se confía en reserva.
  • Es no perder la costumbre de rectificar las equivocaciones cometidas.
  • Es disciplinar constantemente la inteligencia, venciendo la pereza.
  • Es tener como respaldo seguro una actitud ética como base en una conciencia cierta y recta.
  • Es fomentar la curiosidad por cosas y personas y desarrollar un espíritu crítico que razone y argumente.
  • Es no fiarse solamente de la propia experiencia, pues siempre pueden hacer mejor las cosas y siempre hay personas que saben más que uno.
  • Es no despreciar el orden que, a veces, parece ser enemigo del oficio.
  • Es amar y respetar la libertad de los demás para poder vivir con libertad la propia misión.
  • En contribuir a crear una opinión pública al servicio de toda la sociedad y no de unos determinados grupos o sectores. Es trabajar siempre en el bien común y no en el provecho personal.
  • Es tener una pasión que dura toda la vida.

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